
El fenómeno cobró fuerza con el avance de tecnologías como el deepfake. A continuación, cuatro casos reales que muestran cómo operan estas estafas.
La imagen de una celebridad puede valer millones y los cibercriminales lo saben. En los últimos años, los estafadores han explotado el carisma y la credibilidad de personajes públicos para cometer fraudes que combinan ingeniería social, perfiles falsos, vídeos manipulados e incluso el uso de inteligencia artificial.
El fenómeno no es nuevo, pero ha cobrado fuerza con el avance de tecnologías como el deepfake y el uso cada vez más sofisticado de las redes sociales para simular la presencia digital de artistas, influencers y empresarios.
A continuación, conozca cuatro casos reales que muestran cómo operan estas estafas y por qué es fundamental estar atento a estas trampas digitales.
1. ¿Cómo utilizaron los estafadores la imagen de Elon Musk para engañar a un inversor?
Casi 7.000 inversores perdieron 80 millones de dólares en diversas estafas de criptomonedas entre octubre y marzo, tal como lo informó de la Comisión Federal de Comercio de los Estados Unidos. En concreto, la estafa utilizó la imagen del multimillonario Elon Musk para promover inversiones falsas en criptomonedas. El esquema incluía videos deepfake, anuncios patrocinados y páginas falsas que prometían altas ganancias en bitcoin.
¿Pod dónde se distribuía? Por anuncios en X (antes Twitter), bajo la promesa de bitcoins gratis. Pero claro, el enlace dirigía al usuario a un sitio web fraudulento, donde se realizaban los depósitos. La falta de retroalimentación y la dificultad para recuperar los montos llevaron al descubrimiento del fraude.
El caso es un ejemplo de estafa de inversión mediante deepfake, en el que se utiliza como cebo la confianza del público en la figura de Musk.
2. Enrique Iglesias utilizado en una estafa romántica en Argentina
En Argentina, una mujer creyó estar en una relación virtual con el cantante Enrique Iglesias. Todo comenzó luego de unirse a un grupo de fans de Enrique Iglesias en una plataforma digital, donde, poco después, recibió un mensaje privado en WhatsApp y mantuvo conversaciones durante aproximadamente dos años. El delincuente utilizó fotos reales, lenguaje cariñoso y justificó el secretismo de la “relación” con contratos de confidencialidad.
El impostor comenzó a pedir dinero para supuestas emergencias como entradas, gastos de matrícula y envío de regalos. Convencido de que estaba ayudando a la cantante, la víctima realizó varios traslados. El caso es un ejemplo clásico de ingeniería social.
Se trata de una típica estafa romántica, una de las formas más efectivas de ingeniería social, donde se explotan hasta el límite las emociones de la víctima.
3. La identidad de la hermana de Sandra Bullock fue utilizada en una estafa en Facebook
En otro caso, los estafadores crearon perfiles falsos de Facebook haciéndose pasar por Gesine Bullock-Prado, hermana de la actriz Sandra Bullock. Las cuentas falsas, con fotos reales y apariencias convincentes, se acercaron a los fanáticos de la actriz y establecieron conversaciones frecuentes.
Tras ganarse la confianza de las víctimas, los delincuentes pedían dinero para “proyectos personales” o causas urgentes. La estafa sólo salió a la luz cuando los informes llegaron a la familia de la actriz, quienes se pronunciaron advirtiendo a sus seguidores sobre los perfiles falsos.
Este enfoque es común en estafas conocidas como robo de identidad que utilizan el prestigio de terceros para solicitar dinero.
4. Delincuentes se hacen pasar por Brad Pitt y cometen una estafa de casi 850.000 dólares
En España, cinco personas fueron detenidas por suplantar a Brad Pitt para llevar a cabo una falsa estafa romántica y de inversiones. Las víctimas, dos mujeres, creían haber estado en contacto con el actor a través de las redes sociales.
Durante las conversaciones, los delincuentes solicitaron dinero para supuestos proyectos, lo que resultó en una pérdida total de 325 mil euros. Según las autoridades, el grupo incluso utilizaba “mulas financieras” para mover fondos entre cuentas.
Otro caso que involucra al actor fue en Francia, una mujer fue víctima de una estafa en la que alguien se hizo pasar por Brad Pitt utilizando inteligencia artificial. Perdió 850 mil euros en un fraude que comenzó en Instagram, cuando fue contactada por alguien que decía ser la madre del actor. A partir de ese momento empezaron a llegar solicitudes de dinero.
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Conclusión
La elección de usar el nombre de una celebridad no es casual. Las personas famosas transmiten autoridad y confianza, y eso crea un atajo psicológico que reduce la desconfianza natural. Es la base de la ingeniería social, una técnica ampliamente utilizada por los ciberdelincuentes para manipular decisiones. Por eso te recomendamos:
- Desconfía de pedidos de dinero, incluso si provienen de perfiles verificados: Las cuentas legítimas pueden ser hackeadas, y los criminales se aprovechan de la credibilidad de esos perfiles para engañar a los seguidores.
- Verifica cuidadosamente las URLs y nombres de usuario: Los estafadores usan direcciones y arrobas muy parecidas a las reales, cambiando letras o agregando símbolos.
- Evitá hacer clic en enlaces recibidos por mensajes privados, correos electrónicos o comentarios, aunque parezcan legítimos: Siempre accedé a los sitios escribiendo la dirección directamente en el navegador.
- Usá la autenticación en dos pasos (2FA): Además de proteger tus cuentas, hace más difícil que seas víctima de hackeos.
- Mantené tus dispositivos actualizados y utilizá soluciones de seguridad confiables: Un buen antivirus puede detectar sitios fraudulentos, intentos de phishing y archivos maliciosos.
- Investigá antes de invertir o hacer transferencias: Desconfiá de las promesas de ganancias fáciles, especialmente si están asociadas a nombres famosos.
- Denunciá perfiles y páginas sospechosas: Las plataformas cuentan con sistemas de moderación que necesitan de la colaboración de los usuarios para actuar con rapidez.
Los fraudes que utilizan la imagen de celebridades no son meras curiosidades: son delitos digitales con víctimas reales y pérdidas millonarias. Informarte es protegerte, y también ayudar a que otras personas no caigan en trampas digitales.