El comercio electrónico está en auge pero ¿Es seguro para los consumidores?

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Uno de los muchos efectos colaterales de la crisis del COVID-19 es que ha limitado significativamente nuestra capacidad para visitar las tiendas en persona. Dado que los cierres y cuarentenas en todo el mundo han hecho que numerosas tiendas cierren sus puertas durante largos períodos de tiempo, no hemos tenido otra opción que conectarnos en línea para realizar la mayoría de nuestras compras. Teniendo esto en cuenta, no es de extrañar que una nueva encuesta de ESET muestre un aumento importante en la popularidad de las compras en línea durante la pandemia.

La encuesta, que se llevó a cabo como parte de la investigación de tecnología financiera global (FinTech) de ESET, exploró las opiniones de los consumidores sobre las compras en línea, la banca virtual y las finanzas, y mostró que el 61% de los consumidores a nivel mundial compran en línea con más frecuencia que antes de la pandemia. Este aumento en la popularidad de la venta al por menor en Internet es particularmente prominente entre las generaciones más jóvenes, ya que el 70% de las personas en el grupo de edad de 25 a 34 expresaron que compran en línea con más frecuencia.

Dada la falta de oportunidades para comprar en las tiendas presenciales, estos hallazgos no son particularmente impactantes; sin embargo, lo que es más sorprendente es que la investigación de ESET indica que el aumento del comercio electrónico llegó para quedarse, incluso después de que la pandemia haya terminado. De los 10.000 consumidores encuestados en el Reino Unido, EE. UU., Australia, Japón y Brasil, el 40% dijo que esperan seguir comprando en línea después de que termine la pandemia todavía más que en la actualidad. Esto apunta a un cambio fundamental en la forma en que compramos, y es evidente que el impacto de la pandemia en nuestros hábitos de venta minorista probablemente nunca se revertirá.

A medida que las compras en línea continúan en auge, es esencial que los consumidores en línea estén protegidos de las amenazas que acompañan al comercio minorista en Internet. Las empresas a menudo sufren brechas de datos y ataques cibernéticos, y siempre que esto sucede, existe la posibilidad de que los datos personales de los consumidores queden expuestos, lo que los expone a la amenaza de extorsión y ataques de phishing.

Es extremadamente común que los ciberdelincuentes utilicen marcas minoristas establecidas como anzuelos para el phishing, manipulando la confianza de los consumidores en estas marcas para convencerlos de que hagan clic en enlaces maliciosos y revelen información personal, incluidos nombres de usuario, contraseñas y detalles de tarjetas.

Más de dos tercios de los consumidores encuestados por ESET creen que podrían detectar un correo electrónico de phishing que imitara una de las tiendas en línea que utilizan con regularidad. Esto podría indicar una mayor conciencia de los correos electrónicos de phishing entre el público en general debido a su notoriedad en los medios, pero por el gran aumento que hemos presenciado como resultado de la pandemia, con Google registrando un récord de 2 millones de sitios de phishing en 2020, también es posible que muchas personas sigan subestimando el alcance de los esfuerzos de los actores de amenazas.

Solo el 29% de los consumidores encuestados en todo el mundo dijo que sentirse "muy seguros" cuando compran en línea, y el 16% dijo que "no se sienten particularmente seguros" o "nada seguros". Dado que la venta minorista por Internet casi siempre implica ingresar detalles de pago, es evidente que se necesita hacer más a nivel mundial para garantizar que los consumidores en línea estén a salvo de las amenazas cibernéticas.

Se están logrando avances en el campo de los pagos, por ejemplo, con servicios como Apple Pay y Google Pay, que producen un número de tarjeta virtual único para cada transacción, lo que significa que los detalles de la tarjeta no están expuestos, pero los resultados de la encuesta de ESET demuestran que todavía queda un largo camino por recorrer en lo que respecta a inspirar confianza a los consumidores.

Proteger a los consumidores y sus datos de los phishers y otros actores maliciosos es vital, y la misión de ESET es hacerlo utilizando nuestra tecnología de software de seguridad de vanguardia.